El 9 de noviembre de 2019, la policía de Las Cruces fue enviada a la casa de la pareja en Posada Court por un disturbio doméstico. Una llamada al 911 de su hijo indicó que su padre llamó a un pariente indicando que había matado a su esposa, Amber, y que se iba a cortar y suicidar.
Los oficiales intentaron hacer contacto en la casa, nadie respondió y al escuchar movimiento en el interior, finalmente rompieron la puerta principal. Los oficiales observaron sangre en el piso y se apresuraron a evaluar la atención médica necesaria. Encontraron a Baños López con un cuchillo de cocina clavado en el pecho, los agentes pudieron prestarle auxilio ya que aún respiraba.
La mujer, identificada más tarde como Amberly Busby López, fue encontrada muerta con varias heridas de arma blanca, en el piso junto al sofá donde se encontraba Baños-López. Baños-López fue transportado al Centro Médico Regional de Mountainview donde recibió tratamiento y ha estado detenido en el Centro de Detención del Condado de Doña Ana en espera de juicio.
La investigación médica encontró que Amberly tenía 4 puñaladas en el torso y determinó que su muerte fue un homicidio. Baños-López durante su entrevista en el hospital admitió haber apuñalado a Amberly varias veces.
Una audiencia de sentencia será programada para una fecha próxima. Baños-López enfrenta un potencial de hasta 15 años de prisión de los cuales ya ha cumplido 1221 días de reclusión.