Laura y Pablo son estudiantes muy aplicados y con una curiosidad casi insaciable. En la clase de Ciencias hablaron de los cultivos de la región y se les encomendó preparar algo para presentar enfrente de los otros alumnos que mostrara lo más importante quese da en el Sur de Nuevo México. Pablo enseguida pensó que sería muy fácil, pero Laura tenía otros planes.
“Qué te parece si hacemos algo diferente?”, propuso. “Algo con fotos bien moderno, seremos los mejores del curso”, agregó. Pablo se entusiasmó. “Si nos esmeramos el profe nos dará crédito extra” contestó.
Buscaron con cuidado en libros y hasta fueron a la biblioteca a usar las computadoras, pero querían hacer algo mejor, diferente.
“¿Y si vamos en el autobús y tomamos fotos de los cultivos?”, preguntó Laura. Su hermano mayor Daniel, trabaja en una compañía que hace publicidad y alguna vez le ofreció mostrarle lo que hace. “Hay internet en los mismos autobuses y de ahí mismo podemos mandarle los materiales a Daniel para que nos ayude”, pensó Pablo.
Ya con más seguridad y viendo los campos desde las ventanas del autobús las ideas y los detalles fueron multiplicándose. Es que pasaron frente a una granja donde había huertasde chile, campos de algodón, plantas de elote y hasta árboles de nueces, nogales, un poco más atrás. Quedaron en regresar el día siguiente y pasar unpar de horas, hasta que venga el autobús de regreso, consiguiendo los materiales.
La tarde siguiente cumplieron el plan y con sus teléfonos se dieron a la tarea de juntar todo. Laura ensayó su talento de presentadora y hasta hicieron unas tomas dignas delas noticias de la televisión Con la ayuda de Daniel este viaje en autobús se transformó en una pequeña película casi profesional.
Cuando la presentaron frente a toda la clase todos se asombraron. “¿De veras que tenemos todo estopor aquí?”, les preguntaron Si parece que fueron lejos, debe haberles costado mucho, dijo el profesor impresionado mientras que, efectivamente, los felicitó y les dio el crédito extra que tanto deseaban.
Laura y Pablo sonrieron con algo de picardía. Sus dos viajes les costaron muy poquito pues los estudiantes pagan una tarifa reducida y llegar a casa con notas tan buenas bien valió la pena.