En medio de la polémica sobre los permisos ha surgido una nueva controversia
De acuerdo a investigaciones realizadas, la ubicación del muro privado y los permisos con que dicen contar sus constructores podrían significar un dolor de cabeza para ellos y también quien haya otorgado esos permisos descuidadamente.
Al parecer, por mucho tiempo se asumió que la propiedad de la compañía de ladrillos American Eagle cubre por completo el área de las riberas del Rio Grande y la frontera con México. Una revisión detallada de los mapas disponibles en las oficinas de la Ciudad de Sunland Park y del Condado de Doña Ana muestran en el primer caso que American Eagle está dentro de Sunland Park y su zonificación es M2, que permite manufactura. El terreno -y la zona incorporada- está rodeado por una línea lo suficientemente ancha para excluir una significativa porción de la calle Brickland y la costa del rio del lado de Nuevo México. La calle Brickland terminaba -antes de esta construcción- contra la frontera, donde dobla hacia la derecha casi en 90 grados al llegar a ella. Esta zona también está fuera de Sunland Park y al parecer fuera de la propiedad de American Eagle. Es allí donde se construyó el muro privado.
El puente que cruza el rio desde Texas a Nuevo México ha sido cerrado a la circulación, aunque su salida conecta con la vía pública de la calle Brickland, la cual hacia el sur no parece estar dentro de la propiedad de American Eagle.
Idéntica información figura en los registros del “Tax Assesor” (impuestos) del Condado de Doña Ana. Si esto se confirma los permisos de Sunland Park no son correctos pues el mencionado muro se encuentra parcialmente fuera de su jurisdicción. La investigación incluye consultas con CRRUA y la Comisión de Límites y Aguas (IWBC en inglés) para su determinación final.
Es de hacer notar que los constructores han declarado contar con aprobaciones de esta última oficina, lo cual fue negado por la Comisión en entrevista transmitida por la televisión local.