El presidente Trump ha dicho que el joven que masacró a 17 personas en una escuela de la Florida estaba “mentalmente trastornado”. Es probable que así sea, pero los millones de estadounidenses que siguen votando por legisladores que defienden las ventas prácticamente sin restricciones de rifles semiautomáticos también tienen una gran responsabilidad por la demencia de este tipo de asesinatos masivos.
La mayoría republicana del Congreso ha venido apoyando las ventas de armas de una manera virtualmente ilimitada, aún para personas con graves problemas de salud mental. El Senado incluso votó en contra de un proyecto de ley en 2016 que hubiera prohibido la venta de armas a personas que están en la lista del FBI de potenciales terroristas. Por absurdo que parezca, un potencial terrorista no puede subirse a un avión en este país, pero puede comprar un fusil semiautomático.
Fíjense en estos datos:
– El ataque a la escuela Marjory Stoneman Douglas en Florida fue el tiroteo masivo número 30 en el país en 2018, según el Archivo de Violencia de Armas. Y solo estamos en febrero.
– Ha habido más de 1,600 tiroteos masivos desde 2012, según el Archivo de Violencia de Armas. Todos estos tiroteos masivos resultaron en 1,829 personas muertas y 6,447 heridas.
– Estados Unidos tiene la mayor cantidad de armas de fuego en manos privadas del mundo. Hay 89 armas por cada 100 personas en Estados Unidos, comparado con 46 armas en Suiza, 45 en Finlandia y 32 en Suecia, según el Small Arms Survey de 2007.
– Nikolas Cruz, el joven sospechoso de haber perpetrado el asesinato masivo de la Florida con un rifle AR-15 semiautomático, compró el arma legalmente el año pasado cuando solo tenía 18 años. Cruz no tenía edad suficiente para poder comprar legalmente una cerveza, pero pudo comprar legalmente un arma de guerra.
– Las armas semiautomáticas como los rifles AR-15 se usan cada vez más en los asesinatos masivos en Estados Unidos. El hombre que mató a 58 personas en un concierto de Las Vegas el año pasado tenía varios rifles AR-15.
– No siempre ha sido así. Los ataques con rifles semiautomáticos han aumentado desde 2004, tras la expiración de una ley de prohibición de rifles de asalto de 1994. Desde entonces, el Congreso no ha renovado la prohibición, en gran parte por el cabildeo de la Asociación Nacional del Rifle (NRA).
– El Congreso ni siquiera ha querido aprobar una ley que exija verificación de antecedentes para impedir compras de armas por personas con enfermedades mentales.
– La NRA y sus afiliados gastaron alrededor de $50 millones para ayudar al presidente Trump y a los republicanos a ganar las elecciones de 2016. Entre los principales beneficiarios de los fondos de la NRA en las últimas elecciones estuvo el senador Marco Rubio, R-Florida, quien recibió $3.1 millones.
Tras el último asesinato masivo, Trump y la mayoría de los republicanos en el Congreso siguieron el guion habitual: extendieron sus sentidas condolencias a los familiares de las víctimas y pidieron no debatir el tema de las armas durante el periodo de duelo. Ya hemos visto esa película muchas veces: después de unos días, la atención nacional pasa a otro tema, y el Congreso no hace nada.
El senador Rubio dijo después del tiroteo que “esto es inexplicable”. ¿Inexplicable? Lo inexplicable seria que no ocurrieran este tipo de masacres cuando un joven de 18 años con problemas mentales puede comprar legalmente un fusil semiautomático.
Si, la Constitución dice que los estadounidenses tienen derecho a portar armas, pero no dice que tienen derecho a comprar una bazuca, o un misil. La Constitución también dice que los estadounidenses tienen derecho a la libertad de expresión y, sin embargo, existen leyes contra la difamación para evitar que se abuse de ese derecho.
Es hora de que Trump y los republicanos en el Congreso demuestren un liderazgo real y permitan algunas medidas, como controles de antecedentes obligatorios y efectivos para los compradores de armas. De lo contrario, solo habrá una forma de terminar con esta locura: derrocar a la mayoría republicana en el Congreso en las elecciones de noviembre.