La secuoya gigante, el árbol de Joshua y la secuoya de la costa, por su tamaño, antigüedad o rareza, convocan a miles de visitantes en los Parques nacionales de los Estados Unidos. En 2020 soportaron incendios récord que quemaron casi cinco millones de acres en California.
Las secuoyas gigantes son tan antiguas como la Biblia y miden más de 250 pies de atura. El fuego arrasó el 97% del parque, pero las secuoyas pueden vivir miles de años. Sabemos que durarán más que nosotros, pese a las amenazas.
Hasta hace unos años, lo único que mataba a una secuoya gigante de edad avanzada era la vejez. No sólo son los árboles más grandes del planeta –la famosa secuoya conocida como General Sherman tiene 33 pies de diámetro en su base y 250 pies de altura– sino que están entre los más antiguos. Pueden vivir más de 3.200 años.
Son muy resistentes y cuando se corta una secuoya, no siempre es derrotada pues las secuoyas muertas a menudo dan lugar a brotes de varios árboles más alrededor de la base.
¡Insólito!