Durante mucho tiempo las condenas eran dictadas por un rey a su antojo. Más adelante se crearon cortes con jueces y defensores. Los cambios no garantizaron que en ocasiones se apicaran condenas exageradas como estas.
Gabriel March Granados, un cartero de 22 años de edad en España recibió la pena más larga jamás vista. No pudo entregar 42.784 cartas, abriendo 35.718 de ellas y robando su contenido por valor de 50.000 euros. March fue acusado de miles de cargos de fraude, apropiación indebida de documentos (uno por cada carta no entregada) y robo, lo que resultó en una solicitud de 384.912 años de prisión y una multa de 19 millones de euros por el fiscal. Sin embargo, la condena real impuesta fue de 14 años y 2 meses de prisión y una multa.
Chamoy Thipyaso. La sentencia más larga del mundo por corrupción empresarial según el libro Guinness de los récords 2006. Estafó a más de 16,000 tailandeses en un esquema piramidal por valor de $ 204 millones de dólares de ese momen
to. Se pidieron 141,078 años de cárcel.
Charles Scott Robinson, en Estados Unidos. La condena de cárcel más larga pues fue condenado a 5,000 años por cada uno de los seis cargos en su contra para un total de 30 000
La mayor cantidad de tiempo de cárcel como resultado de una apelación fue para Darron Bennalford Anderson por delitos que van desde la violación de una anciana en el Condado de Tulsa hasta hurto, robo y secuestro. Lo sentenciaron a 2,250 años. Apeló y fue recondenado. Recibió un período adicional de encarcelamiento de 9.500 años, que luego se redujo en 500 años a 11.250 años
En México, el título se lo llevó Juana Barraza, apodada la “mataviejitas”. condenada a 759 años de cárcel por matar y robar a 16 mujeres mayores en Ciudad de México. Se cree que podría tener más de 40 víctimas mortales. Golpeó y mató a sus víctimas con movimientos que había aprendido como luchadora profesional con el nombre de La Dama del Silencio. La sentencia especifica que ella será puesta en libertad condicional en 2058, a los 100 años de edad.
Finalmente, es importante mencionar a Sholam Weiss. Declarado culpable de participar en la quiebra de National Heritage Life Insurance Corporation en Nueva York donde 126 millones de dólares “desaparecieran”, 2500 personas quedaron sin ahorros y la empresa en bancarrota. Ha sido la persona con la sentencia de cárcel más larga por un crimen financiero. Apeló por una sentencia menor, pero fue denegada y terminó con 845 años. Encontrado tras huir a Austria, la pena le fue perdonada por el ex presidente Donald Trump por lo que pasó solo 10 años preso.