(Segunda parte) 

Continuando con la conversación del mes pasado sobre la mejora del reciclaje comunitario lleva la discusión a los siguientes dos pasos. Hasta ahora hemos aprendido que el Paso 1 es realizar compras respetuosas con el medio ambiente como consumidor. El Paso 2 centra nuestra atención en reutilizar elementos que normalmente tiraríamos a la basura. Los ciudadanos preocupados por el medio ambiente pueden examinar su propio consumismo para evaluar la reducción de la cantidad de cosas que tiran, independientemente de si existe un programa de reciclaje o no. 

Esto puede considerarse como una bendición disfrazada. En el caso de que una ciudad no tenga un programa de reciclaje activo, esto brinda la oportunidad de adquirir un compromiso más profundo y renovado para vivir un estilo de vida ecológico más allá del contenedor de reciclaje. Utilizar opciones de reciclaje en su área local también es un paso importante para encabezar el crecimiento o la creación de un programa de reciclaje. Cada comunidad y pueblo que implementa un programa de reciclaje en espacios públicos ayuda a impulsar las tasas de reciclaje y la industria del reciclaje.  

Depende de la comunidad utilizar activamente estas opciones de reciclaje en espacios públicos de manera responsable. 

3) Reciclar correctamente. El uso de contenedores de reciclaje en espacios públicos requiere que la comunidad tenga cuidado con el material que coloca en estos contenedores. Los contenedores de reciclaje identificados nunca deben usarse para eliminar basura. 

4) ¡Crea tu propio equipo de reciclaje! No es el único en su vecindario que quiere mejorar los esfuerzos de reciclaje en su comunidad. Organice colectas de ropa, organice días de recolección de basura en el vecindario u organice proyectos de reciclaje para los niños de su vecindario. 

Pasemos a la acción y recordemos que hacer correr la voz y exigirnos estándares más altos puede ayudar a que las tasas de desvío avancen en una dirección más positiva.