Jamari Sánchez, de 19 años, fue sentenciado a 16 años de cárcel en el Tribunal del Tercer Distrito. Sánchez fue declarado culpable por un jurado de Las Cruces y declarado culpable de un cargo cada uno de asesinato en segundo grado y manipulación de pruebas. Sánchez fue sentenciado a 15 años por el cargo de asesinato en segundo grado. Se agregó un año debido al uso de armas de fuego para un total de 16 años. El juez del Tribunal del Tercer Distrito Judicial, Driggers, impuso 12 años de prisión y 4 años de suspensión en libertad condicional. Driggers además condenó a Sánchez a 364 días de prisión por posesión de un arma de fuego por parte de una persona menor de 19 años, y esos 364 días correrán simultáneamente con los 12 años de prisión.
El 5 de septiembre de 2021, la policía de Las Cruces fue notificada del hallazgo un cuerpo tirado en el lado norte de la calle cerca de 1003 E. Juniper. El fallecido fue identificado como Mateo Portillo, de 30 años, con una herida de bala en la cabeza. Durante la investigación, la policía pudo rastrear sus movimientos la noche anterior. Portillo había estado en el bar y parrilla RAD Retrocade durante las primeras horas de la mañana del 5 de septiembre. Alrededor de las 2 am, Portillo parecía ebrio y un oficial de policía de Las Cruces que patrullaba lo detuvo afuera de RAD. Luego, dejó su vehículo estacionado cerca y comenzó a caminar hacia su casa.
Las imágenes de videovigilancia muestran a Portillo caminando hacia su residencia, y se ve al vehículo sospechoso, un Ford Taurus modelo más antiguo, apagando los faros y conduciendo lentamente junto a Portillo cuando se disparó desde el lado del pasajero del vehículo. Las imágenes del vehículo sospechoso circularon solicitando ayuda del público. Un testigo vio el Taurus y pudo entregar a la policía su matrícula. La policía pudo rastrear el vehículo e identificarlo como el Ford Taurus a partir de las imágenes de vigilancia. El dueño del vehículo en su declaración confirmó que él y un grupo de sus amigos, uno de ellos Jamari Sánchez, habían estado bebiendo y de fiesta, y detalló los hechos de la noche. Una investigación más exhaustiva del Ford Taurus mostró evidencia de salpicaduras de sangre en la puerta del lado del pasajero. Finalmente, el arma utilizada en el incidente fue localizada posteriormente enterrada en una zanja de una zona rural.