Todos pusieron de lo suyo para hacer del evento un éxito. “El parque se llenó como nunca antes”, expresó un asistente. Es que se trató de el primero de varios eventos en pro de una noble causa. “La ciudad le entregó a una organización de veteranos un terreno lo suficientemente grande como para construir un monumento a los veteranos, quizás el más grande de la región”, dijo Martín Lerma, alcalde de Anthony (Texas).
Francisco Cabral, veterano en el pasado y promotor de espectáculos hoy en día, explicó que con estos festivales se juntarán fondos para iniciar los trabajos. “Toma varios pasos antes de que se inicie la construcción en sí”, explica Cabral, “lo primero es adaptar los diseños al área que nos confiaron. La ciudad fue muy generosa y podremos convertir el lugar en algo digno para que vengan visitantes que antes seguían de largo en la I-10 sin parar en Anthony”, agregó.
Se espera que la construcción de un monumento que tendrá estatuas de metal y un anfiteatro, marcado con una bandera nacional iluminada y visible desde la autopista, genere recursos para la ciudad a través de la creación de comercios nuevos, restaurantes y alojamiento. Todos los sectores se benefician cuando aumentan los visitantes y la población tiene espectáculos de nivel.
“Este fue el primer paso y aprendimos mucho de como hacerlo aún mejor y más grande la próxima vez”, dijo Cabral. El alcalde Lerma, visiblemente emocionado, dijo que siempre quiso brindarles un reconocimiento a los veteranos. “Mi padre fue uno de ellos y esta es una forma de homenajear a los que con valentía dieron todo por nuestro país”, finalizó.
Se estima que dada la envergadura del proyecto este tome dos años en construirse para lo cual se invertirán entre uno y dos millones de dólares.